LA IGLESIA ROMPE EL SILENCIO
La inquietud de la burguesía y las señales de la Iglesia católica Andrés Figueroa Cornejo Rebelión .org Juan Alsina, Miguel Woodward, Rafael Maroto, André Jarlán, son sólo algunos nombres de sacerdotes católicos que entregaron su vida a la causa popular en el Chile de la dictadura pinochetista. Con la mirada fija en el Cristo pobre, y la pasión liberadora de su mensaje, abandonaron la comodidad de las catedrales y optaron por la barriada dura del pueblo. Este hecho –que convierte la ética cristiana en un ejercicio de generosidad insobornable- recorre toda América Latina. Sin embargo, como suele ocurrir en una sociedad de clases, también existe una iglesia de los de arriba y otra de los de abajo. Hasta Dios tiene su reverso en una sociedad signada por desigualdades estructurales, y la dominación de una minoría que se hace de sus privilegios a costa de la explotación de una mayoría. LA DEMOCRACIA CRISTIANA Y LA CUESTIÓN SOCIAL Proveniente de un Partido Conservador integrista, culturalmen...