EL LIMBO HIPÓTESIS ABANDONADA
Diario de mujer La Real Academia Española define el limbo (del latín, limbos, límite) como el “lugar o seno donde, según la Biblia, estaban detenidas las almas de los santos y patriarcas antiguos, esperando la redención del género humano”. Y agrega también: “lugar adonde, según la doctrina cristiana, van las almas de los que, antes del uso de la razón, mueren sin el bautismo”. Pero como bien señala María Moliner en su estupendo diccionario de uso de la lengua castellana, además de definir al limbo como “orla del vestido” o “lugar de ultratumba”, explica la expresión “estar en el limbo”, es decir: “estar distraído y atontado; no enterarse de las cosas que se dicen o de lo que pasa”. Bien podría jugarse, entonces, con la paradoja de que quien no se enteró de la inexistencia del limbo es, en realidad, porque está en el limbo. En efecto, la Comisión Teológica Internacional en un reciente documento de 41 páginas supera la concepción del limbo y da por terminada esa “hipótesis” de la teologí...