DEMOCRACIA E IGLESIA. No a la censura ni imponer silencio a la divergencia.

Diario de mujer Pedro Pablo Achondo M. Hubo un tiempo en que la Iglesia era más democrática, en que el pueblo de Dios elegía a sus obispos, en que había más diálogo y discusión (los primeros 4 siglos del cristianismo se caracterizaron por esto). No a la censura ni imponer silencio a la divergencia. Hoy por hoy nos enfrentamos a una tensión concreta y complicada: mientras la sociedad, los países, las organizaciones sociales buscan democratizar realmente sus estructuras, la Iglesia mantiene su orden piramidal rígido y coercitivo de origen constantiniano-medieval, argumentando en parte inconsciente (o explícitamente en algunos documentos) su origen divino. Por más que se intente afirmar lo contrario, esto es lo que aparece, lo que se ve. Es verdad que el tema no es fácil, y que en nuestras comunidades, grupos y presencias eclesiales podemos actuar de otros modos (mientras no choquemos frontalmente) y dar vista ciega a esa macro estructura un poco lejana y un poco ajena. Pero, también es v...