Lo que me preocupa es el silencio de los buenos

Leila Gebrim Kozac escribe un artículo que comparto, es demasiado obvio lo que sucede hay que seguir insistiendo sobre como se maneja Chile políticamente.
El texto dice:
“Es tu país” Te necesitamos, joven. Es tu deber hacerte responsable de tu país. Sin tí el mañana se hace más rudo, más insípido, banal. Sin tí seguiremos repitiendo los errores que reprochas para no votar
"Lo que más me preocupa no es el grito de los violentos, ni lo de los corruptos, ni de los deshonestos, ni de los sin ética. Lo que me preocupa es el silencio de los buenos": Martin Luther King.
A mí también me asusta el silencio de los buenos, la ausencia de tantos buenos, de jóvenes buenos que no usan los derechos que la democracia les da para cambiar las cosas. Me asusta y me apena, porque yo y tantos mayores ya estamos recorriendo los caminos que llevan a la vejez tenemos el anhelo de que vengan rostros jóvenes, mentes jóvenes, manos jóvenes, a tomar la posta en esta marcha sin fin hacia la construcción de un país mejor, más justo, más ecuánime, más decente y más amoroso.
La patria no puede hacerse sola, nada se hace solo. Sin sus manos, sus ideas, sus ideales, sus sueños, su fuerza renovadora, la patria envejecerá junto con nosotros.
No es justo para la patria, no es justo para los que luchamos tanto para recuperar la democracia que siempre enorgulleció al pueblo chileno.

Te necesitamos, joven. Te necesitamos y es tu deber hacerte responsable de tu país. Sin tí el mañana se hace más rudo, más insípido, banal. Sin tí seguiremos repitiendo los mismos errores que tú nos reprochas para no votar. ¿Acaso no te has dado cuenta de que lo hacemos porque no vemos estos errores? Para nosotros estamos haciendo lo correcto. No somos menos patriotas que tú. No amamos menos a Chile que tú. Simplemente, tenemos diferentes miradas y tú, con tu silencio y tu ausencia, no estás ayudando mucho a que las cosas cambien.

Por qué no te inscribes, por qué no te tomas los partidos, por qué no conquistas las sillas cansadas del Congreso y las llenas con tu juventud, con tu forma distinta y hermosa de pensar, de sentir. A lo mejor te equivocarás varias veces. A lo mejor harás llorar a muchos de nosotros y estará bien, porque equivocarse es parte de crecer. Lo que no puedes hacer es mantenerte al margen y descalificar a los que intentamos hacer algo.

Ven, te invito a ejercer tus derechos. No es tan terrible. No hay nada que uno no pueda soportar como ciudadano si está lleno de amor a la patria y a la comunidad. Quién sabe. Tú podrás resolver cosas tan importantes que nosotros no conseguimos, como: un país con mejor salud, mejor educación, más equidad, más libertad de disentir, pensar y actuar sin temor, más solidario, más hermano, más humano. A lo mejor te tomará tiempo; sin embargo, si lo logras todo habrá sido válido.

Además, uno de estos días dejarás de pensar sólo en tí o en un grupo reducido de jóvenes.
 Serás papá o mamá y verás que la vida toma una importancia mayor, más bella y también más grave y te darás cuenta de que lo que más deseas depende también de tí, de tus acciones y decisiones. No dejes que otros hagan por tu futuro lo que yo sé puedes hacer tú.
Hazlo tú, yo confío en tu inmenso corazón, en tu capacidad de amar, de ser feliz, de crear, de innovar y de hacer de este país, que nunca dejó de ser tuyo, un país completamente tuyo.

LEYLA GEBRIM EN DIARIO LA NACIÓN